Misionera

Mi Busto

por Andrés S Alvez



Para llegar a Victoria había que moverse hasta una de las puntas de la ciudad. Llegar al lugar siempre es una parte importante de la muestra.
Pasar por Puerto Madero, la reserva ecológica, llegar a la fuente de las Nereidas y cruzarse con muchas personas disfrutando del sol.
¿Qué nos mueve para ir a ver algo?
Cerca de la fuente hay un busto nuevo, la cara de Victoria hecha por una impresora 3D.
El busto es fucsia y el color resalta entre las plantas, los árboles, el cielo y el cemento. Es el monumento de una millennial, hija de la estridencia de internet. Victoria transforma su cuerpo en datos y después lo vuelve a materializar en un monumento público digital.
Los monumentos se pensaban como espacios de identificación pública, de construcción de una idea de lo común y de intervención en la memoria colectiva. Hoy ya casi no se hacen grandes monumentos públicos con formas humanas. Ahora los monumentos son edificios con vidrios espejados que parecen un chip dentro de la ciudad convertida en motherboard.
Algunos monumentos públicos hechos por artistas mujeres o que representan a mujeres importantes de la historia argentina pasaron por procesos complicados en su instalación en la ciudad de buenos aires. La fuente de las Nereidas se movió dos veces de lugar por incomodar a las personas que se horrorizaban por los desnudos. La estatua de Juana Azurduy se emplazó atrás de la casa rosada y se movió de lugar al poco tiempo por ser incómoda para el gobierno de turno. Estxs monumentxs no quieren quedarse quietxs, quieren moverse, no les gusta la piedra, el hierro y el mármol. Quieren ser plástico, telgopor o elástico. La inercia del movimiento que vivieron queda orbitando con ellas.
El busto de Victoria sigue esta tradición, vive esta inercia y se emplaza un par de horas para después cambiar de lugar y recorrer la ciudad. Es una estatua que te atrae y te lleva a su órbita. Un monumento que invita a moverse, a sacarse fotos, a peinarse, maquillarse y bailar en una fiesta de color, plástico, profanación y comunidad.

Victoria fue la muestra individual de Victoria Papagni, en Chiquita.
Chiquita es un espacio de arte en una caja de cartón, un proyecto de Julián Sorter.
La muestra fue el 12 de mayo de 2018 junto a la Fuente de las Nereidas, en Costanera Sur, CABA.